El trabajo de la ONG Uno Punto Cinco se centra en la acción climática, pero además tienen como objetivo central el comunicar -con evidencias- para que no se aumente la temperatura global por sobre los 1.5°C. Paz Correa, coordinadora del organismo, habló de sus desafíos y metas, de la participación en la reciente COP30 de Brasil y del lanzamiento del Hub de Transición Energética para Latinoamérica.

La personera representa a las juventudes climáticas que están impulsando el cambio en Chile y en la región. Además, ha liderado proyectos como la Academia de Transición Energética (ATE) y el libro, de la misma especialidad, para Latinoamérica y el Caribe. “Somos una organización chilena que siempre tuvo el foco en impulsar soluciones para enfrentar la crisis climática, desde una justicia más social, de territorio, pero también de género”, destacó a Girl Power.

Paz Correa, añadió, que durante estos años (seis desde su creación), la ONG ha desarrollado diversas acciones basadas en cuatro objetivos fundamentales. “Nuestros pilares de trabajo son educación, comunidad, comunicación e incidencia. Entonces, debajo de cada uno de ellos, hemos hecho varias iniciativas con la sociedad civil y la comunidad, con dos grandes focos: acción climática y transición energética”, añadió.

Actualmente, el eslogan de Uno Punto Cinco es acelerar las transiciones justas, tanto en temas de energía, de agua y clima. Por lo mismo, buscan democratizar el acceso a la información, fortaleciendo capacidades y, hoy en día, creando narrativas que conecten a las personas. “La educación es la semilla de la acción”, comentó la coordinadora.

Trabajo regional

Uno de los hitos trascendentes de la ONG es la Academia de Transición Energética, posicionada dentro del pilar de educación de Uno Punto Cinco. “Surge en Chile en 2022, con un programa atingentes a la realidad energética del país. Pero este programa siempre activó mucho interés en toda Latinoamérica. Entonces, en esa oportunidad, postularon 900 personas en un cupo que era para 100 cupos. Ahí nos dimos cuenta de que este tema genera mucho interés”, contó Paz Correa.

Por lo mismo, tras dos años, en 2024, la ONG lanzó el programa para Latinoamérica y el Caribe. Esta vez, entre las condiciones, no había límite de edad, se priorizó la paridad y tampoco se restringieron las profesiones. “Lo hicimos más interdisciplinario. Entonces, en esa oportunidad, tuvimos 3.500 postulantes. Finalmente, tuvimos a 350 estudiantes y, el resto, es decir, más de 3000 personas, quedaron en la categoría oyente”, añadió la profesional.

Por lo mismo, tras este estudio, la ONG lanzó el Libro de la Transición Energética para Latinoamérica y el Caribe, que es una guía, para casi toda la región, y que cuenta con un enfoque territorial y transformador, buscando ser un insumo para aquellas personas (profesionales o no) que quieran introducirse en el mundo de la energía y su esperada transformación.

Finalmente, Paz Correa habló de su participación en la COP30, realizada hace pocas semanas en Brasil, donde pudieron, como organización, lanzar el Hub de Transición Energética para Latinoamérica. “Vamos a estar generando un ecosistema regional, en torno a conocimiento, formación de datos, comunidades e historias de impacto. (Sobre la COP30) Me gustó mucho, pero uno siempre espera más como, por ejemplo, integrar la perspectiva de género en la acción climática y energética”, anheló.