Deysa Nanolife: Conoce la alternativa de limpieza creada a través de nanotecnología

Para todas las familias, el cuidado en la limpieza del hogar es fundamental. Por lo mismo, la empresa Deysa Nanolife creó una serie de productos sustentables, con nanotecnología, que permiten un ahorro económico y también ayudan a la sostenibilidad del medio ambiente. Marcelo Olivares, CEO de la compañía, entrega los detalles de esta innovación.

La tecnología nace con el propósito de ofrecer una alternativa sustentable y principalmente están enfocados en un mejor uso del consumo de plástico o bolsas del mismo material contaminante. “Nuestra alternativa viene a reemplazar los plásticos de un solo uso y cuenta con una eficiencia muy poderosa”, explica el CEO de la empresa, quien conversó con Victoria Walsh, en Café Plus.

La incursión en nanotecnología, por parte de la empresa, partió durante la pandemia, con la fábrica de mascarillas Deysa Care. Con este producto, la firma creció bastante, llegando a muchos puntos de venta. Y en el camino fueron innovando, agregándole nanopartículas de cobre y plata a estas mascarillas que ayudaban a la desinfección contra el coronavirus.

“Con la experiencia aprendida, quisimos orientar al laboratorio científico a generar otros desarrollos naturales. Con esta nanotecnología decidimos mejorar los desafíos del futuro, en este caso con los plásticos de un solo uso. Por lo mismo, le ofrecemos a las personas botellas reutilizables de sus limpiadores de siempre”, sostiene el CEO de Deysa Nanolife.

Cómo funciona

Marcelo Olivares explica que las personas deben comprar la botella reutilizable de la empresa y, tras su uso normal, pueden adquirir las recargas llamadas nanostick. Estas vienen en un sachet que se disuelve al entrar en contacto con el agua. “Por ejemplo, se introduce este nanostick dentro de la botella, se rellena de agua y tras cuatro minutos este concentrado se disuelve. Ahí, se agita durante 10 segundos y el producto queda listo para utilizar”, señala.

Según explica Olivares, el modo de uso es muy fácil. Una de las ventajas de utilizar esta innovación, es que la caja de nanostick pesa sólo 40 gramos, en cambio, cada producto de limpieza tiene un peso de más de un kilo. Además, la preparación es muy rápida y el desafío científico concentra una fórmula poderosa en un tamaño pequeño.

“Ahí es donde juega el rol la nanotecnología, ya que es la ciencia que se encarga de llevar los componentes químicos a un tamaño nanométrico, es decir, mil veces más pequeño que un grano de arena. Nosotros compactamos la fórmula para lograr un resultado eficaz, usando componentes de la naturaleza”, indica.

Y dentro de esos componentes, Olivares señala el uso del aceite de la cáscara de la naranja, que es un residuo para la industria. Los desechos de esta fruta son un componente orgánico y su aceite pasa a ser un residuo. Por lo tanto, a través de un proceso de alta energía y elevado desarrollo se generaron nano cápsulas que incorporamos a nuestros productos. “Lo más importante es que limpian igual o mejor que los mejores limpiadores de la industria”, ejemplifica.

Amplia variedad

Dentro de la variedad de productos, el CEO de Deysa Nanolife indica que están trabajando fuerte en la remoción de los limpiadores, pero también han potenciado otros atributos muy importantes como los aromas. “Por ejemplo, muchas personas buscan un rico aroma y nosotros le ofrecemos un limpia pisos con olor a lavandas del sur y cítrico natural”, indica.

Además, la empresa cuenta con una línea de desinfectantes para todo tipo de superficies, es decir, baños, cocina, mesa exterior, etc. También, se suman a la oferta, los anti grasa y los limpiavidrios. “Vamos a seguir desarrollando otros productos, pero no nos queremos apurar en el lanzamiento de estos, ya que primero debemos asegurarnos de que, los que tenemos, funcionen muy bien”, comenta.

Marcelo Olivares señala que tiene una oferta disponible. Hay un mix de botellas reutilizables a un valor de $7.990 más despacho, esto es, más de un 30% de descuento que en el comercio tradicional. Señala que, al año, el mundo está vertiendo más de 8 millones de toneladas de plástico a los océanos y que Chile sólo recicla el 10% de los plásticos. “Queremos validar este producto en Chile y después explorar otros comercios en el extranjero. Esta tecnología tiene mucho potencial en el mundo entero”, enfatiza.