Instalada ya en Dubái, para participar en la COP 28 o la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, Sonia Español-Jiménez, directora ejecutiva de la Fundación MERI, cuenta los detalles del trabajo que realizará en la cita que busca encontrar las mejores soluciones para la grave crisis climática del planeta.

La Fundación MERI desarrolla investigación científica, educación ambiental y advocacy, en la vinculación con las comunidades, al servicio de la conservación de ecosistemas estratégicos para la mitigación del cambio climático en Chile y el mundo. Pertenece a la Filantropía Cortés Solari (FCS), institución cuyo mandato es promover el desarrollo integral y sostenible de nuestro país y el mundo, en conformidad con los ODS de las Naciones Unidas.

“Llevamos unos 25 años promoviendo el desarrollo integral y sostenible. Y, dentro de esta fundación, ayudamos desde el punto de vista científico, educacional y legal. Nuestra meta es la conservación de los diferentes ecosistemas y que son sumamente estratégicos para combatir el cambio climático. Por lo mismo, llevamos cinco años con una relación estrecha con el IPCC, que es el panel de expertos de cambio climático de Naciones Unidas”, cuenta Sonia Español-Jiménez a Café Plus.

La ejecutiva comenta que desde hace muchos años se viene hablando del cambio climático y las crisis y las consecuencias ya se están viendo en muchas poblaciones a nivel mundial, tanto en temas biológicos como del propio ser humano. “Y justamente la COP28 puede ser clave para medir el progreso hacia la consecución de todos los objetivos que se tomaron en el Acuerdo de París en cuanto a mitigación, adaptación y protección climática”, agrega la profesional.

Aporte de instituciones y objetivos

Sonia Español-Jiménez espera que en el encuentro en Dubái se haga una especie de balance de cómo se están haciendo los trabajos. Y, tras eso, poder tomar las acciones más firmes. “La idea es que sea una COP más de acción que de palabras. Y creo que en algunos aspectos ya se empieza a ver eso. Ya ha habido algunos anuncios y llevamos compromisos monetarios para trabajar en las consecuencias del cambio climático”, indica la directora de Fundación MERI.

La ejecutiva señala que instituciones como en la que ella trabaja, de tintes filantrópicos, son una especie de complemento de organismos estatales. Indica que la crisis climática les afecta a todos y no solamente es responsabilidad de gobiernos ser responsables en tomar las medidas necesarias para evitar las consecuencias y poder llegar a un modelo de desarrollo más sostenible.

“La sociedad civil tiene un rol fundamental en impulsar que estos acuerdos realmente ocurran. Nuestra labor es hacer el seguimiento y la vigilancia para que las decisiones que se tomen se hagan efectivas. Desde la filantropía buscamos apoyar a los gobiernos, ya que es imposible que un sólo estamento resuelva la problemática. Nuestra meta, en general, es hacer que la discusión sea mucho más concreta”.

Sonia Español-Jiménez, de Fundación MERI.

Finalmente, la directora ejecutiva de Fundación MERI señala que esta COP 28 se determinen algunas temáticas como, por ejemplo, los mecanismos de financiamiento climático. El objetivo es seguir apoyando la evidencia científica del IPCC y siendo una especie de puente con el sector privado. “Queremos dar un pequeño salto y no solamente ser ‘espectador’, sino que comenzar a generar más acciones de diálogo en las mesas de trabajo. Debemos lograr un mínimo acuerdo entre todos los países que participan de esta COP”, anhela.