Preferir bebidas retornables es contribuir a cuidar el planeta. Para entender mejor las vueltas que da una botella, presentamos el #DesafíoRetornables, un retrato audiovisual de todos los protagonistas por los que pasa el formato 100% circular.

El camión rojo de Coca-Cola Chile llega cargado hasta la puerta de un almacén en La Florida. Nelson, el repartidor, se baja y descarga varias javas de bebidas retornables, el formato 100% sustentable que más se vende en los negocios de barrio. Con esa acción comienza toda una operación logística en donde la botella de PET retornable dará una, dos, tres y hasta 12 vueltas entre la planta y el cliente, reutilizándose siempre que sus condiciones sean óptimas, para finalmente terminar su vida útil y ser reciclada.

Para explicar el ida y vuelta de los envases reutilizables propusimos el #DesafíoRetornables, que busca resaltar la importancia de cada uno de los actores de la cadena de valor en la circularidad de las botellas.

Las retornables representan el 60% de la venta de Coca-Cola Chile y los almacenes son los que más las mueven. La logística donde circulan los envases se basa en la durabilidad de la botella, una cadena de distribución que funciona como reloj y una zona en planta donde se almacenan, lavan, esterilizan y vuelven a llenar las botellas. Las de vidrio retornable pueden dar hasta 35 vueltas, mientras que las plásticas pueden rotar hasta 12 veces antes de ser recicladas.

Botella de mano en mano

El sentido de este #DesafíoRetornables es retratar la cadena humana donde están representados los distintos actores que intervienen en la vida de una botella retornable. Para eso, participaron en el video el repartidor de Coca-Cola Andina, Nelson Celedón; los almaceneros Alejandra Carrasco, de Puente Alto, y Yan Cárdenas, de La Florida; y la comunicadora social de Bajos de Mena, Melyna Montes.

“Al diseñar una botella retornable estamos abarcando los dos primeros principios de la economía circular, que son: eliminar los residuos y la contaminación desde el diseño, y mantener productos y materiales en uso por el mayor tiempo posible”, explica la directora del Pacto de los Plásticos Chile, Antonia Biggs, otra de las protagonistas del #DesafíoRetornables.

La periodista de El Mostrador, Natalia Espinoza; el vecino de Santiago Centro, Alberto Squella; y los recicladores de base, Lizanett Oyarzún y José Miranda, también se animaron a motivar al mayor consumo de retornables como una forma de contribuir al cuidado del planeta.

De la misma forma Carmen Zárraga, vendedora de Oxxo, y María Giménez, operaria de una tienda de Petrobras, fueron parte del desafío, en el marco de las alianzas de Coca-Cola con esas tiendas de conveniencia para acercar el formato retornable a nuevos consumidores.

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