Marcial Huneeus comentó sobre los 10 años de historia del innovador proyecto Patrio Vivo

La Fundación Patio Vivo tiene como desafío intervenir patios de jardines infantiles, escuelas, colegios y liceos; y convertirlos en “paisajes de aprendizaje”. Marcial Huneeus, director de innovación del proyecto, comentó los 10 años de historia del organismo y cómo han transformado la educación a través del desarrollo físico, socioemocional y cognitivo de los estudiantes.

El proyecto busca que niños, niñas y adolescentes crezcan, jueguen y aprendan en contacto real con la naturaleza. “Hay mucha investigación sobre los beneficios del juego y el aprendizaje al aire libre. Hoy sabemos que los patios escolares son un lugar con grandes explanadas de cemento y poca actividad física. Por lo mismo, queremos transformarlos en espacios activos”, indicó el experto a Neurotopic.

Patio Vivo lleva cerca de 10 años de trayectoria y han intervenido más 100 patios en el país, e diversas regiones. “Nuestras transformaciones son bien radicales. Sacamos el cemento, ponemos pisos drenantes, donde el agua sea parte del territorio. Además, plantamos muchos árboles, hacemos lomas e insertamos juegos de barras”, agregó Marcial Huneeus.

El director del proyecto señalo que este cambió provocó que los alumnos tuvieran más ganas de ir al colegio, acrecentando la motivación escolar. “Los directivos nos han indicado que ha aumentado la asistencia y la matrícula, en un tema clave como es la concurrencia escolar. Los niños quieren jugar, hacer amigos y tener instancias para compartir”, comentó.

Favorece la integración

Marcial Huneeus indicó que, al momento de comenzar un nuevo proyecto, realizan un trabajo con cámaras para determinar de qué manera los niños usan el patio. “Además, levantamos varios indicadores respecto al juego con la naturaleza, con desafíos, juegos activos, interacción de géneros, etc. Hoy, hay cifras que indican que el 50% de los menores tienen obesidad infantil”, alertó.

Por lo mismo, un Patio Vivo genera oportunidades de moverse, socializar, desarrollar habilidades de lenguaje, de autorregulación y además para manejar el estrés. “También, nuestros proyectos generan espacios de Aula Abierta. Por ejemplo, tenemos un pequeño anfiteatro donde un curso puede ir a trabajar o a hacer clases. Esta metodología la desarrollamos con ayuda de la Fundación Olivo, para generar coherencia y conexión con el aprendizaje”, indicó el director.

Marcial Huneeus comentó el ejemplo de una escuela en la región de Los Lagos que inauguró su Patio Vivo Cultivable. Con apoyo de la Fundación MC, trabajan con especialidades técnicas como gastronomía y atención de párvulos. “Estamos en seis liceos técnicos y hoy ya se ha ampliado a la formación media. Es increíble lo que pasa: todos quieren salir a cultivar, a cocinar; y tiene mucho foco en la alimentación saludable, la sustentabilidad, la cultura local y la empleabilidad”, comentó.

Finalmente, el director de innovación de Patio Vivo indicó que, según estudios de la UNESCO, un 50% de los jóvenes está insatisfecho con su lugar de estudio. Por su parte, 33% cree que lo enseñado no funciona. Mientras que el 20% sostiene que los aprendido allí no le será útil para la vida ni para el trabajo. “Hoy se habla mucho de las trayectorias educativas y hay que dar espacio para que los niños reflexionen, encuentren intereses y puedan responder sus preguntas claves”, puntualizó.