La Asociación Gremial de Industriales del Plástico representa, desde hace más de 60 años, a un sector que ha puesto la innovación y sustentabilidad al servicio de las personas, con el fin de mejorar en su calidad de vida  Hoy, el gremio reúne a más de 90 empresas que abarcan toda la cadena de valor del plástico, y que a su vez están comprometidos con la transición de Chile hacia una economía cada vez más circular, para que el plástico sea visto como un recurso valioso. Magdalena Balcells, gerente general de ASIPLA, habla de los desafíos y el trabajo regulatorio actual.

La experta es ingeniera civil industrial de la Universidad de Chile y tiene estudios posteriores sobre planificación y gestión financiera. Según el último estudio de ASIPLA, la tasa de reciclaje de plásticos en Chile creció en un 15% entre el periodo 2020-2022, siendo la mayor alza en el área de envases y embalajes. “Hacemos un levantamiento de toda la infraestructura de valorización, desde que te llega el residuo como materia prima, el proceso y la venta. Entonces, le damos una segunda vida al plástico”, cuenta a Girl Power.

Magdalena Balcells cuenta que hoy en día existe la tecnología y los aditivos para hacer que esos materiales sean cada vez más nobles y -destaca- que el plástico es un tremendo aliado. “Subimos en un 15% el volumen total gestionado o valorizado, pero sigue siendo mucho más alto lo que se gestiona a nivel de aquellos reciclajes que provienen de la industria o del comercio, a diferencia de los productos que vienen desde los hogares”, aclara.

La gerente general de ASIPLA señala que en los hogares se ha hecho más difícil encargar o tratar los residuos. En las empresas, comenta, hay encargados de separar este material de desecho, lo que hace más eficiente la recuperación del material postindustrial. “Lo que se recupera de los hogares es puro PET (envases y botellas de bebida, agua y aceite, etc.). Pero necesitamos además reciclar los paquetes de tallarines, yogur, galletas, azúcar, porotos, etc. Todos esos plásticos”, indica.

Desafíos de la industria

Para Magdalena Balcells la idea es ir recuperando material pero este también tiene que tener a alguien que lo valorice y genere así demanda de mercado, que es principalmente el foco de la economía circular y, por ende, el funcionamiento del modelo económico. “Nadie lo hace de puro altruismo. Por ejemplo, el plástico es un tremendo aliado para transportar alimentos o agua porque es liviano, resistente, reciclable y, si se compacta, tiene un montón de beneficios”, indica.

“Hay que ir aceitando la máquina para que se reciclen más resinas. Hoy en día recuperamos principalmente PET, pero ha habido mejoras en polipropileno, que lo encontramos en frascos de champú o detergente. También hay recuperación de polietileno flexible. Hicimos un acuerdo de producción limpia que busca incentivar la demanda por resinas recicladas, para incorporarlas en nuevos productos para asegurar el avance hacia la economía circular”

Magdalena Balcells, gerenta general de ASIPLA.

La Ley REP, la Hoja de Ruta de Economía Circular y la Ley de Plásticos de Un Solo Uso (PUSU), son iniciativas público-privadas, donde también participa el Ministerio de Medio Ambiente, para poder avanzar hacia la circularidad. “La Ley PUSU tiene dos grandes partes: una, destinada a los envases de servicio; y la otra es acelerar la inclusión de material reciclado y volver a hacer más masivo el uso de los formatos retornables en Chile”, sentencia Balcells.