Fluor es una empresa transnacional, que tiene más de 100 años de historia, dedicada principalmente a desarrollar proyectos de minería y metales. La compañía cuenta con más de 30 mil empleados a nivel global, quienes permiten cumplimientos éticos, relaciones con las comunidades, gobernanza, inclusión, y un gran trabajo en salud, seguridad y medioambiente. Cristián Garrido, gerente de Ingeniería, conversó con Minería del Mañana sobre este presente.

Y una de las noticias más trascendentes de Fluor ha sido la reducción de más de 60 toneladas de dióxido de carbono en su gestión. En Chile, la empresa lleva 45 años, dedicada a colaborar con diversos tipos de industrias. Por ejemplo, a nivel corporativo, la firma tiene una unidad llamada Urban Solutions, que pretende dar soluciones a todos los problemas relacionados con la comunidad y sus alrededores.

Cristián Garrido comentó que desde el año 2006 comenzaron a trabajar con los primeros lineamientos de esta meta, como por ejemplo entendiendo los procesos de efecto invernadero y cuál eran las mecánicas globales desde el punto de vista de manejo ambiental. “Fluor tiene una visión global y está involucrada en distintas áreas del mercado y de diversos continentes. Por lo tanto, tenemos que entender los impactos a nivel de desarrollo proyectos y sus contribuciones”, indicó.

Por lo mismo, señaló el gerente de Ingeniería, tienen clientes que andan buscando desarrollar proyectos con motivo del cambio climático, es decir, con reducir las huellas de carbono. Y dada la experiencia de Fluor, se han ido moviendo en esa dirección. “Viendo nuestro comportamiento empezamos a medir nuestros parámetros de consumo de energía y agua. Y esto ya se ha empezado a materializar con metas más concretas”, indicó.

Meta ambiciosa

Cristián Garrido explicó que cuando se miran los procesos de descarbonización globales, se establecen distintos tipos de alcance (1, 2 y 3). Por lo mismo, la meta que Fluor logró corresponde a lo realizado en las instalaciones y oficinas de la compañía. Pero también se mueve a través de flotas dentro de las unidades de negocio. “Empezamos a medir en pos de las métricas propias que tenía Fluor, y después empezamos a regularlo a nivel global”, señaló.

Por ejemplo, el gerente de Fluro contó que en Santiago están ubicados en un edificio que data de la década del setenta, por lo tanto, tiene gasto en ascensores e iluminación, que hoy día tienen un uso en su gestión totalmente diferente. Por lo mismo, se preguntaron qué hacer para reducir la huella de carbono, y comenzaron a trabajar con el gasto energético. Después, en detalle, distribuyeron los accesorios por piso, centralizando los espacios. “Hubo muchas paredes que se derribaron para hacer pasar luz de una manera distinta. Eso también generó un cambio de conducta respecto de los conceptos de privacidad”, ejemplificó.

Tras todos esos cambios, Cristián Garrido explicó que Fluor Chile logró generar, a través de la instalación de paneles solares, 3 megawatts de energía local, para poder abastecer los consumos del edificio. Por otra parte, al cambiarse a energía LED. Reduhieron en un 12% el consumo de los sistemas de iluminación generalizados. Cambiaron el sistema de aire acondicionado, donde dejaron de consumir 14 toneladas la huella de carbono. “Y también está todo el soporte, por ejemplo, de los empleados. Hoy, hay algunos que cargan sus autos eléctricos en puntos determinados o creamos un parking para las bicicletas”, afirmó.

Finalmente, el gerente de Fluor Chile adelantó que ahora se vienen nuevas metas, donde el siguiente impacto tiene que estar puesto en los proyectos que ejecutan, donde deben estar conectados directamente con sus clientes. Señaló que tienen target distinto y que algunos de los desafíos serán ejecutables en los años 2030, 2040 y 2050, respectivamente.