Juan Bascuñán dialogó sobre el aporte fundamental de la ciencia y la tecnología en los deportes
Hoy en día, la ciencia y la tecnología están presentes en todas las actividades de los seres humanos. Y en época de Juegos Olímpicos, si hablamos de medallas y récords mundiales, los aportes digitales son clave a la hora de conseguir las marcas. Juan Ignacio Bascuñán, académico de la Universidad San Sebastián, sabe de eso ya que participó en un estudio a algunos atletas que participaron de los Juegos Panamericanos Chile 2023.
En conversación con Rockstars, el director de la Licenciatura de Ciencias de la Actividad Física de la USS trabajó -durante la gesta en Santiago- en un análisis biomecánico de deportistas, entre ellos de la chilena Marina Weil. Y en septiembre próximo debería salir el detalle de este estudio, donde participó además el Instituto Nacional de Educación Física de Cataluña (INEF).
Juan Ignacio Bascuñán tiene una larga trayectoria como pedagogo y además entrenador de la rama de basquetbol de la Universidad Católica de Chile (entidad académica). También fue parte de la Escuela de Salud del Duoc UC y se desempeñó como gerente de la Fundación Real Madrid en Chile, cuya sede estaba en la comuna de La Florida. Allí, compartió enseñanzas con exfutbolistas como Elías Figueroa, Marcelo Zunino, Leonel Herrera (padre e hijo) y Patricio Toledo, entre otros.
El docente fue uno de los pioneros en participar en los Juegos Mundiales Universitarios, organización que reúne a lo más destacado del deporte a nivel de la enseñanza superior en el mundo. “Fue una grata sorpresa, logramos asistir como país y pudimos insertarnos en la organización. La primera vez que participó una delegación chilena fue el año 1995 en Japón”, comentó.
Sobre su experiencia con la Fundación Real Madrid, Bascuñán señaló que se trataba de reclutar alumnos de escuelas vulnerables, entrenarlos y que tuvieran la posibilidad de viajar a Europa y conocer a sus ídolos deportivos. “La idea era sacar a los niños de la oscuridad formativa en que se encuentran, tanto familiar como socialmente. Todos los años llevábamos a un grupo de entre 15 a 20 niños al Santiago Bernabéu. Adicionalmente habían otro tipo de ayudas, en temas de alimentación, charlas con los padres, etc.”, recordó.
Bascuñán y la tecnología en el deporte
Desde el año 2012 que Juan Ignacio Bascuñán está en la USS, donde lo llamaron para implementar una carrera docente deportiva. Pero además, en ese proceso, lograron una relación bastante estrecha con el INEF, está entidad académica española, para conocer cómo se trabaja en Europa en el desarrollo de deportistas de elite con tecnología.
Por ejemplo, en 2019 y 2022, llevaron al Instituto Nacional de Educación Física de Cataluña a 50 alumnos, de diversas carreras, relacionadas a deporte y salud, para que se especializaran en la parte kinesiología deportiva. “Por lo tanto, hubo una formación internacional de los alumnos de manera importante. Este año llevaremos del orden de 100 alumnos para allá”, indicó.
Tras ese acuerdo entre ambas instituciones, se logró hacer las conversaciones para analizar, tecnológicamente, a los atletas del mundo con ocasión de los Juegos Panamericanos de Chile 2023, algo inédito en la historia de este certamen. “En la pista, la ciencia hace su aporte de manera relevante y decidora. Entonces, decidimos hacer un estudio observacional de aspectos técnicos y biomecánicos en algunas pruebas de atletismo”, indicó.
El sistema consistía en grabar mediante máquinas a los atletas, en este caso, corriendo y saltando. Para ello, llegaron a Chile un grupo de ocho españoles más algunos profesionales locales. “Fueron 25 personas que hicieron este estudio en las pruebas de velocidad 100, 200, 400, 800, 1500 y 5000 metros. Logramos registrara a los atletas a 300 cuadros por segundo. Con ello se puede ver claramente e identificar si el deportista cometió algún error técnico”, señaló.
Finalmente, Juan Ignacio Bascuñán contó que el estudio, dado la amplitud de sus resultados, debería estar listo en septiembre u octubre de este año. Pero adelantó que la ciencia y la tecnología son aliados precisos para lograr romper las marcas actuales. “Es fantástico el aporte de la ciencia. Por ejemplo, la diferencia en los Juegos Olímpicos, entre una medalla de oro u otra, está en aspectos mínimos que la ciencia puede corregir”, puntualizó.