Experto explicó su trabajo con mindfulness, que ayuda al estrés y mejora la concentración
El mindfulness es una técnica de meditación que entrena la mente para concentrar la atención y darle otra dirección a los pensamientos. Muchas personas la practican para reducir el estrés, mejorar la concentración o aumentar su bienestar emocional. Álvaro Langer, académico e investigador de la Facultad de Psicología y Humanidades de la Universidad San Sebastián, explicó su trabajo con estrategias de este método.
Hoy en día, la salud mental de las personas, sobre todo después de la pandemia, ha decaído significativamente. Y, además, los tratamientos psicológicos y psiquiátricos están lejos del alcance del común de las personas. “La salud mental es un tema de preocupación y deben aumentar los recursos destinados para ello. Ahora, hay que preocuparse especialmente de los grupos más vulnerables, como pueden ser los adolescentes y los de diversidad sexual”, indicó el docente a Rockstars.
Tras realizar su tesis de pregrado en obesidad infantil, Álvaro Langer realizó un doctorado en Granada, España, en el Programa de Análisis Funcional en Contextos Clínicos de la Salud. En el viejo continente, donde estuvo cerca de siete años, comenzó a trabajar el método mindfulness. “Lo podemos entender como la capacidad que tenemos todas las personas de poner nuestra atención en el momento presente, sin emitir juicios que están emergiendo en nuestra mente y en nuestra conciencia”, explicó.
El mindfulness, añadió, como concepto, tiene tradición contemplativa de miles de años asociada con el budismo, y el camino principal para desarrollar esta capacidad es estar en el momento presente, a través de la meditación. “Pero uno puede desarrollarla de otra forma y no simplemente de la clásica meditación. El mindfulness es un rasgo que todas las personas tenemos y es entrenable y cultivable”, agregó.
Mindfulness en contextos educativos
Álvaro Langer indicó que, pese a vivir en un mundo digitalizado y virtual, el ser humano debe marcar una diferencia. Y la forma de tener un aprendizaje distinto, es referirse a las cosas simbólicas. “Como seres humanos, convivimos en un mundo de realidad virtual, ya que no está en este momento. Y esto tiene que ver con la adquisición del lenguaje y con distintos elementos. Justamente el mindfulness nos ayuda a recordar que ese mundo que nos preocupa, es en gran parte simbólico”, explicó.
Por lo mismo, el académico comenzó con la idea de introducir estrategias de mindfulness en contextos educativos. Anteriormente, comenzó a desarrollar el método en personas que tenían psicosis o episodios psicóticos. “Me interesó llevar la meditación a nivel preventivo en los colegios. Ya había distintas experiencias en algunas partes del mundo y cuando regresé a Chile hice un primer estudio donde implementé mindfulness en dos colegios”, indicó.
El académico explicó que para poder desarrollar este método es necesario contar con un grupo de control activo, donde uno propone una actividad con similares condiciones. “Pero eso no siempre es posible hacerlo. Entonces, se hace un Treatment-As-Usual (TAU), que se es para contextos clínicos, pero también educativos. Hacemos los clásicos cuestionarios de autorreporte, donde te preguntan cuán estresado estuviste las últimas dos semanas, y en eso evaluamos en distintas variables (salud mental, bienestar y regulación emocional, entre otras)”, especificó.
Finalmente, Álvaro Langer señaló que el procedimiento aún está en etapa de evaluación y análisis, pero que se han dado cuenta de algunas cosas y que están en línea de la última evidencia que ha surgido respecto al mindfulness, principalmente en adolescentes, que es la prevención universal. “Para todos es súper importante desarrollar habilidades socioemocionales y lo que tiene más sentido es que el joven diga, que de haber ciertos contextos, yo me puedo relajar”, afirmó.