El big data y la inteligencia artificial están también al servicio del monitoreo de las redes sociales. QSocialNow es una empresa argentina que se dedica al análisis de estas conversaciones públicas, lo cual sirve como insumo para entes gubernamentales o empresas. Su director, Martin Buzzi, conversó con Felipe Ovalle en OhMyGeek! Next.

Son múltiples las conversaciones que suceden a través de las redes sociales. Es importante para las empresas o entes gubernamentales poder “tomar la temperatura” de esas opiniones o contenidos vertidos de manera pública, para la toma de decisiones. Entonces, el big data y la inteligencia artificial se convierten en herramientas esenciales para lograr estos objetivos. 

QSocialNow “es una plataforma que escucha las conversaciones públicas que suceden en las redes sociales, básicamente, Twitter, Facebook e Instagram. También escuchamos los diarios tradicionales y los post de lo que la gente comenta, según explicó en OhMyGeek! Next su Director, Martin Buzzi. Él contó que prontamente se va a sumar la aplicación Tik Tok, con lo cual van a ampliar la audiencia a la que llegan.

A partir de los diálogos que se dan en internet, QSocialNow puede sintetizar lo más relevante y comunicarlo a sus clientes. Un aspecto clave, es que esta plataforma está especializada en el idioma español, identificando distintas expresiones coloquiales de cada país o grupo etáreo.

Esta herramienta tiene dos grandes universos de clientes: en primer lugar, los gobiernos y los estados y en segundo, el sector corporativo. Un uso recurrente es el diseño de campañas publicitarias, puesto que la información de los usuarios, permite desarrollar perfiles, y así, crear publicidad personalizada y dirigida a potenciales clientes específicos. Además, puede ser utilizado como insumo para políticas públicas.

Es más, la plataforma permite identificar si una conversación es racional o emotiva y si la gente quiere continuidad o quiere cambio. Entonces se puede cruzar la información, y determinar, por ejemplo, si las personas racionales están más dispuestas al cambio o no. “Esto termina siendo un gigantesco focus group con millones de personas opinando”, concluyó Buzzi.