Científicos de la U. de Chile generan dispositivo para combatir la pandemia

El instrumento que podría llegar a ser hasta cinco veces más barato que otros similares en el mercado es capaz de medir el CO₂ en ambientes cerrados, y además tiene la capacidad de subir los datos, en tiempo real a la nube. El instrumento pone el foco en los últimos hallazgos científicos, relativos a la propagación de virus Sars-Cov-2, esto es la ventilación de los espacios. 

“La tecnología que inspira este instrumento proviene de técnicas usadas en el estudio del universo, pero esta vez lo que quisimos fue sacar nuestra mirada del cielo y ponerlo en la Tierra”, así lo explica Ricardo Finger, Ingeniero en Jefe del Laboratorio de Ondas Milimétricas de la U. De Chile. El prototipo creado en conjunto por investigadores del Centro de Excelencia en Astrofísica y Tecnologías Afines CATA y el Centro de Modelamiento Matemático CMM, permite evaluar qué tan peligroso es un lugar cerrado ante el riesgo de contagio de covid-19. Los científicos ya implementaron este detector en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile.

El instrumento tiene la capacidad de medir los niveles de dióxido de carbono existente en un lugar cerrado, y de esa forma determinar qué tan ventilado y, por consiguiente, qué tan riesgoso puede ser estar en una oficina, un laboratorio, una sala de clases, etc.

“El corazón de esta creación es un sensor que mide la concentración de CO₂, emitiendo luz infrarroja que es absorbida por las moléculas de dióxido de carbono en el aire”, explica Francisco Förster; Doctor en Astrofísica de la Universidad de Oxford e investigador del Centro de Modelamiento Matemático. Dicha medición se despliega en una pantalla, y cuando la concentración supera un umbral de 700 partículas por millón, se activa una señal de alarma. La concentración de CO₂ que detecta este sensor, así como la temperatura y humedad, son transmitidas por señales de radio a una central, que puede monitorear al mismo tiempo a decenas de sensores.

“La central está conectada a Internet vía wifi, y es la encargada de subir los datos a la nube, una vez ahí, los datos pueden ser consultados por una interfaz que alimenta una página web donde es posible consultar los valores históricos de cualquier sensor de la red”, aclara Förster, quien es también académico de la Iniciativa de Datos en Inteligencia Artificial FCFM U. Chile.

Lee más noticias de ciencia en TXS Plus.