Hace mucho tiempo que se viene hablando de contaminación marina. Y no precisamente nos referimos a la suciedad que recala en el mar, sino al alto tránsito de embarcaciones pesqueras o turísticas que amenazan la vida de algunas especies. Sebastián Niklitschek, director de Inteligencia Artificial de Acústica Marina, se refiere a la tecnología que usan para ayudar a combatir este grave problema.

La empresa, oriunda de la ciudad de Valdivia, tiene como objetivo principal la resolución de problemas en entornos acuáticos, a través de la creación de soluciones tecnológicas en I + D + i. La versatilidad se esta tecnología permite utilizarla en aplicaciones como: defensa marítima, conservación marina e industria portuaria y salmonera. En conversación con Daniel Silva, de Ciencia del Futuro, el director detalla el trabajo de la compañía.

Acústica Marina es una firma global de Tecnología Hidroacústica, fusionada con Inteligencia Artificial (IA), que busca aportar sostenibilidad y preservación de los ecosistemas marinos. “En simple, lo que hacemos es poner equipos en el agua, que funcionan de manera autónoma, que son capaces de desarrollar algunas tareas para verificar la cantidad de ruido que hay en los ecosistemas marinos”, explica Niklitschek.

El director de IA de la empresa comenta que los seres humanos, que viven en la tierra o en zonas aéreas, entienden o sienten el ruido generado por industrias o vehículos en general. Por lo tanto, se hacen disposiciones para combatir esa contaminación acústica. Pero en el mar, todo es distinto. “Esa misma contaminación se da en el agua, pero el punto es que como no vivimos ahí, se nos hace difícil entenderlo y solucionarlo. En el agua el ruido se propaga de forma más eficiente y eso afecta mucho la geolocalización en las especies”, indica.

Niklitschek agrega que el ruido es mucho más dañino en el agua que en la tierra o en el aire. En el mar, la luz solar sólo llega a metros de profundidad, de ahí en más la única forma de moverse es a través de la geolocalización. “Las especies marinas para moverse o desplazarse poseen un oído muy fino y el ruido que generan las embarcaciones les afecta en su medio. Por lo mismo, nosotros instalamos estos equipos, estos hardware, con IA, para medir ese ruido y entregar las alertas necesarias”, señala.

Especies en peligro

Acústica Marina tiene tres focos de trabajo. Primero, está la evaluación ambiental de ruido submarino. Segundo, una detección y monitoreo de la fauna marina. Y tercero, una detección de actividades ilícitas. Esto último se refiere principalmente a pesca ilegal, robo y otros delitos que afectan a la industria salmonera y acuícola.

El director de la empresa da como ejemplo el caso de las ballenas de la costa chilena. Señala que estos mamíferos son extremadamente inteligentes y, por lo tanto, es muy difícil que, en condiciones normales, una ballena sea atropellada por una embarcación. Pero dado el gran ruido que ocasionan estos medios de transporte, estas especies marinas se desorientan y son embestidas ocasionándoles la muerte.

“La solución pasa por afectar lo menos posible los mecanismos de localización de la fauna marina, pero también pasa por alertar a las embarcaciones para que, en caso de ser necesario, disminuyan su velocidad. Con este simple cambio de ruta o baja en su velocidad, logramos que las ballenas, los lobos marinos o los delfines no estén en riesgo”, anhela Sebastián Niklitschek.

Proyectos y desafíos

Hoy en día, la empresa está trabajando junto a la Compañía Minera del Pacifico en la localidad de Chungungo, caleta pesquera ubicada a 65 km al norte de la ciudad de La Serena. Allí, instalaron cuatro boyas inteligentes, las que cuentan con hidrófonos que son monitoreados las 24 horas del día y los siete días de la semana.

“Lo que hacemos es medir ruido. Pero resulta que ese hardware inteligente nos permite evitar colisiones entre embarcaciones y ballenas, pero también nos ayuda a detectar otro tipo de fauna. Con el apoyo de IA podemos tener más dispositivos en el agua, y eso hace que el número de aplicaciones que se pueden ir desarrollando para obtener más información es infinito”, comenta Niklitschek.

Finalmente, el director de IA de Acústica Marina señala que el foco principal de su empresa es generar sostenibilidad en el ecosistema marino. Su idea es lograr un triple impacto: tanto en lo económico, social (comunidades) y medioambiental. Si bien, su principal labor se desarrolla en Chile, desde hace meses están teniendo un potencial crecimiento, lo que les ha permitido realizar convenios con Panamá y lograr iniciativas comerciales con otros países de Latinoamérica.

Revisa un video corporativo de la empresa: