Para fomentar la gestión sustentable del agua, desde este 2021 empresas de distintos sectores podrán adherirse al Acuerdo de Producción Limpia (APL), Certificado Azul. De esta manera, se busca que el sector corporativo incluya al vital elemento dentro de sus pilares estratégicos. 

Tradicionalmente en Chile, para las empresas “el agua era solamente considerada dentro de la industria como el valor que costaba hacer las instalaciones para la extracción y la energía del agua desde los pozos o desde algún sistema natural”, según comentó Claudia Galleguillos, líder de estrategias hídricas de Fundación Chile en el programa Ciencia del Futuro.

Desde 2013 se vienen desarrollando fórmulas para incentivar ese cambio de mirada en el sector empresarial. El objetivo central era “incluir dentro de la gestión corporativa toda la gestión real del agua”, aclaró Galleguillos. Eso implica hacer que no solamente observaran su sistema productivo hacia adentro, sino también sumar una mirad a las consecuencias externas de su labor. 

Las empresas pueden obtener el Certificado Azul una vez que “empiezan a realizar una gestión real de sustentabilidad en el tiempo de su propio negocio pero también con colaboración con otros, así, es un incentivo que se genera que comiencen a mirar y a cambiar su perspectiva de negocio y donde el agua pueda pasar a ser un eje estratégico dentro de su gestión”, según explicó la líder en estrategias hídricas de Fundación Chile. 

Frente a la escasez hídrica que se enfrenta a lo largo del país, las empresas deben tomar medidas que aporten a la sociedad, pero que paralelamente les permita sostener su negocio a lo largo del tiempo. “El medio ambiente no es una traba, sino que es la oportunidad de poder sostener mi propio negocio en el tiempo”, concluyó Galleguillos.