José Miguel Furnaro tuvo la oportunidad de conversar en esta edición de TXS Topic junto a Javier Arriola, Head of Brand and Marketing de Algramo; quien explicó cómo ha sido la historia de esta startup de venta de productos a granel y que hoy busca conquistar mercados internacionales.

La historia de Algramo se remonta al año 2013 cuando su fundador José Manuel Moller pudo darse cuenta a través de su experiencia comprando en almacenes de barrio que existía lo que denominó un “impuesto a la pobreza”, esto porque “las personas con menos ingresos no podían comprar formatos más grandes de productos, que eran más baratos, y debían comprar en el día a día. Con esto pagaban mucho más por productos de primera necesidad, además de consumir más plástico”.

Ante esta problemática que mezclaba aristas tanto sociales como medioambientales, es que Algramo encuentra una solución que podía unir ambos mundos y nace la idea del regreso de la venta a granel. “Primero comenzamos el trabajo con almaceneros, teniendo aproximadamente 4000 puntos de venta. Poco a poco esto comenzó a mutar, sabíamos que tenía que ser una solución a nivel global y lo podíamos conseguir trabajando con las principales empresas”.

Como parte de este cambio en su forma de trabajar, es que Algramo logró generar alianzas con grandes empresas que comercializan otro tipo de productos, por ejemplo Unilever Chile, “ellos fueron nuestros primeros partners y comenzamos a implementar la recarga sustentable a domicilio”, explica Javier Arriola. Un ejemplo de esto es su trabajo con OMO, con quienes a través de la venta recargable de productos lograron “posicionar esta nueva forma de consumir y cambiar los hábitos de consumo de las personas”.

Este cambio lo han podido notar en Algramo, ya que se dieron cuenta que “cuando le ofreces a una persona un envase reutilizable el mindset cambia, porque saben que el plástico tiene un valor, ya que lo ocupas constantemente una y otra vez”. Gracias a estos avances, es que desde el 2019 que se encuentran trabajando con grandes marcas, aplicando un modelo de delivery con recargas, transformándose en una empresa con desarrollo tecnológico, pero sin olvidarse de sus orígenes, ya que continúan el trabajo con almaceneros.

Ahora el próximo paso no solamente es abarcar mercados internacionales, sino que también innovar en más áreas a nivel local. Como parte de la venta de productos de limpieza, es que con OMO están creando “un piloto en ferias libres de Santiago, vendiendo la versión concentrada del detergente”.

Pero no es solamente el modelo de negocio de Algramo lo que refleja una innovación, ya que las herramientas para que las personas puedan comprar también significan un avance tecnológico. Para la primera compra, las personas deben adquirir un envase especial que encuentran en los puntos de venta, “un smartpackaging, el cual tiene un chip que se conecta con los dispensadores

y la aplicación de Algramo, y así puedes tener toda la información correspondiente al envase y su proceso de elaboración, como la reducción de C02, agua, etc. Tangibiliza la reutilización”. A pesar del impacto que pueda tener este cambio de hábitos como el que impulsa Algramo, Javier Arriola también enfatiza que no solamente reciclar es el camino “ya que esto es como un parchecurita”, teniendo en cuenta que al año “producimos más de 300 millones de toneladas de plástico” y siempre es más.

Es necesario un cambio de paradigma en las personas, ya que el reciclaje ayuda pero no es todo, la clave es reutilizar también.