¿Dónde están las ingenieras?: Experta analiza inserción laboral de estas profesionales
El pasado 23 de junio de festejó a nivel global el Día Internacional de la Mujer en la Ingeniería. La idea es concientizar sobre la importancia de esta profesión ejercida por cada vez más jóvenes y que, además, constituye una gran oportunidad para las futuras generaciones de ingenieras. Hoy, en el mundo, el 30% de la masa que ingresa a estas carreras son mujeres.
En conversación con Fernanda Varela, del programa Girl Power de TXS Plus; Consuelo Fertilio, fundadora y directora de la Fundación Mujeres Ingenieras de Chile, analiza el presente de estas profesionales en Chile. La profesional además es especialista en equidad de género en el ámbito universitario, en la especialidad STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas).
Fertilio señala que hoy congregan a más de 2 mil ingenieras de distintas especialidades y no sólo nacionales. “Muchas organizaciones no se dan el tiempo de hacer las conexiones ni las articulaciones para insertar a mujeres ingenieras. Por lo mismo, nosotras estamos jugando un rol relevante al motivar, primero, a las niñas que quieren estudiar estas carreras y, segundo, convenciendo a las estudiantes universitarias para que no se vayan en segundo o tercer año”, señala la experta.
Según comenta Consuelo Fertilio, en las carreras ‘masculinizadas’, como Ingeniería Eléctrica, Ingeniería Mecánica, Ingeniería Metalúrgica o Ingeniería Informática, se produce una gran fuga hacia otras especialidades, donde las mujeres ven un mayor equilibrio. “Principalmente vemos un sentimiento de soledad en ellas”, manifiesta.
Plan de retención
En 2022 se comenzó a trabajar con la Corporación Nacional de Facultades de Ingeniería de Chile, que agrupa a 30 facultades a nivel nacional, ya que existía un interés genuino, por parte de las decanas y decanos de retener a las mujeres ingenieras y ver qué estaba sucediendo con ellas en segundo o tercer año de universidad.
Además, el plan también consiste en traer a las niñas y adolescentes a estudiar carreras ligadas a la ingeniería. “Existen becas que promueven la mayor participación de mujeres. Si bien, ingresan cerca de un 30%, las que egresan son un porcentaje menor. “Hay mucho temor de perder el sello, ya que a las mujeres les cuesta ser estratégicas, por ejemplo, al momento de elegir práctica o cuando comienzan a trabajar. De hecho, en ellas hay un tema de agradecimiento por permitirles trabajar más que buscar una alternativa ideal”, explica Fertilio.
Otro tema importante es que algunas organizaciones no contratan mujeres por la edad fértil de estas. Por suerte, cada vez son menos. Pero, viendo temas positivos, hay políticas públicas que están ayudando a esta inserción femenina al mundo ingenieril. En septiembre de 2022 comenzó a regir la Ley 21.369, que entre muchos componentes aboga por la no discriminación. Por otra parte, a partir de 2024, para acreditarse, las universidades tendrán que poner énfasis en la perspectiva de género.
Brechas de 100 años
En el Informe Global de Brecha de Género 2023 -lanzado por el World Economic Forum- indica que a nivel mundial hay un 69% de reducción de brecha máxima entre hombres y mujeres. Sin embargo, el avance es lento, ya que en la teoría de que se continuara a esta velocidad, se necesitarían 131 años para alcanzar la plena paridad. Respecto de Chile, tuvo un salto de 20 lugares más arriba que en 2022.
Dentro de los indicadores, se miden cuatro factores: participación política, educación, salud y participación económica. “En este último ítem, Chile está entre os países que más se iba a demorar el alcanzar la paridad. Por eso, es hoy el momento de hacer algo importante, pasar de la intención a la acción”, comenta Fertilio.
Por lo mismo, en su organización cuentan que la idea de congregar a mujeres ingenieras nació de la sensación que esto no era un tema de competencias ni capacidad; sino que había otros factores que influían. “Hacemos vínculos con mujeres que trabajan en ingeniería. Buscamos acercar conceptos a las niñas y adolescentes (desde quinto básico). Realizamos eventos donde articulamos y donde las profesionales motivan a las más jóvenes”, explica.
Y siguiendo el mismo contexto, puntualiza: “Nos hacemos cargo desde el acompañamiento organizacional, cambios culturales, las agendas de género, etc. Porque no solamente nos tenemos que ocupar de que haya más ingenieras, sino que además se desarrollen en espacios laborales donde desplegar todo su talento. Buscamos que el género no sea una barrera”.