ASOLAM presenta su innovadora planta de tratamiento de neumáticos fuera de uso

Hace poco tiempo se lanzó la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), la cual llama a las empresas a reciclar sus residuos. Y dentro de sus contadas exigencias, está la labor de reciclar neumáticos fuera de uso (NFU). Por lo mismo, la empresa ASOLAM, hace pocos días, presentó una innovadora planta, ubicada en la región de Valparaíso, que trata estos productos bajo un proceso llamao pirólisis.

En conversación con Minería del Mañana, Luis Venegas, fundador y director técnico de ASOLAM, explica el procedimiento de la planta, que no sólo trabaja para la minería, sino que para muchas otras industrias del país. Sabemos que hoy en día, la cantidad del parque automotriz crece a pasos agigantados, por lo mismo, los desechos de neumáticos se amplifican.

“Partimos con la idea en el año 2018, visualizando que se venía la Ley de Responsabilidad de Extensión Productiva. Nos embarcamos en buscar esta tecnología en el extranjero y tras ver diversas opciones en Rusia e Italia, nos decidimos con importarla desde China. En 2019 compramos la máquina, pero recién en el período 2022-2023 pudimos empezar con la marcha blanca”.

Luis Venegas, fundador de ASOLAM.

Hoy en día, la máquina cuenta con todos los permisos y el pasado 11 de octubre se realizó su respectiva inauguración, donde formalizaron un hito con la comunidad. “Es la primera planta autorizada de la región de Valparaíso (sector Placilla), que está marcada para el cumplimiento de metas de la famosa Ley REP, que está dentro de los cinco residuos prioritarios que contempla la ley, donde uno de ellos son los NFU”, explica el fundador de ASOLAM.

Comercialización de subproductos

La planta tiene la capacidad de procesar 10 toneladas de NFU diarios, es decir, unos 200 o 300 neumáticos de camión dentro de un reactor. Hoy día, en Chile, de acuerdo con estadísticas, hay una producción de 180 mil toneladas anuales. Por otra parte, un estudio de las Naciones Unidas establece que hay más de 3.300 millones de toneladas de neumáticos botados en vertederos y en la calle.

“Las distintas acciones de tratamiento obedecen a esta demanda que hay que absorber, para no seguir aumentando la voluminosidad de la disposición de estos residuos en la calle o en los vertederos. Uno anda en la calle y ve botados neumáticos y no sabe qué hacer con ellos o cómo gestionar su tratamiento. Por lo mismo, la Ley REP busca que se autoricen plantas y se genere una valorización al proceso sustentable”, señala Luis Venegas.

La técnica con que se tratan estos NFU se llama pirólisis, proceso térmico que lleva más de 30 años en el mercado, que es una especie de olla a presión donde se calientan los neumáticos en ausencia de oxígeno. Esto produce aceite combustible y un sedimento llamado carbón black, que se comercializan. “El combustible, que es aceite pirolítico, tiene más de 10.500 kilocalorías y el carbón black sirve como pigmento para hacer nuevos neumáticos o para darle cierta dureza a plásticos”, explica el fundador de ASOLAM.

Todo este proceso demora aproximadamente dieciséis horas. Sobre la contaminación, Luis Venegas señala que sólo se emite vapor de agua. “El proceso es inocuo, porque es interno. Todos los vapores que se generan son condensados, generándose el aceite hibrolítico, y respecto al exceso que se pudiese generar, se inyecta nuevamente al sistema para que sea autosustentable. Es decir, es un proceso cerrado”, sentencia Venegas.