Jóvenes Estrellas es el espacio que conduce Bernardita Cadiz y en su último capítulo tuvo como invitada a Consuelo Correa, docente de la carrera de Diseño UX/UI de la academia Desafío Latam, con quien abordó el tema de accesibilidad a la web y diseño de aplicaciones inclusivas.

Consuelo Correa explicó que el diseño de experiencia de usuario (UX) resuelve los problemas, a través de investigaciones que se realizan a personas para entender cuáles son sus necesidades. “Hace un match perfecto entre lo que necesita el negocio, el usuario y lo que realmente se puede hacer con la tecnología que se tiene”, señaló.

Además, agregó que su foco de trabajo está puesto en entender las barreras de contexto que se dan a la hora de hablar de personas en situación de discapacidad.  De esta forma, aclaró, resulta más fácil asegurar la accesibilidad dentro de los diseños que están creando.  “Diseñar no solo para las personas que ven o escuchan, sino que diseñar para todos”, dijo.

Postuló que damos por hecho cosas que no son tan obvias. Por ejemplo, las personas que no pueden usar sus manos prefieren enviar mensajes a través de su voz. En este contexto, “el WhatsApp es una aplicación bastante inclusiva”, puntualizó Consuelo Correa.

La diseñadora de Desafío Latam aseguró que existen consideraciones para todo tipo de personas.  Están aquellas con discapacidades cognitivas y en esos casos buscan que los textos sean lo suficientemente claros para que cualquier persona los entienda.

Según Consuelo Correa, el gran problema que tienen los diseñadores es que terminan creando como si ellos fueran los usuarios, cuando el desafío está en abordar los problemas que presentan las personas con discapacidad. “Deberíamos trabajar en equipos en el más amplio sentido de la palabra. Si los incorporamos nos vamos a preocupar de que esté su voz”, expresó.

Finalmente aclaró que los usuarios son parte de todos estos procesos y siempre están en mente independiente del rol que estén jugando.

La docente de Desafío Latam, cree firmemente que la accesibilidad nos beneficia a todos ya que les entrega autonomía y empoderamiento a los usuarios. 

Acerca de lo costosas que pueden resultar estas tecnologías, añadió que si se realizan desde la estructura el proceso posterior resulta más económico. “Es un cambio de filosofía… Debemos considerar realmente a las personas y ponerlas en el centro”, sentenció.