Diego Valencia, jefe de SNASPE, explicó las claves para monitorear a especies bajo riesgo en Chile

El programa Nuestro Planeta, conducido por Marcelo Lagos, tuvo como invitado a Diego Valencia, jefe de la sección de monitores e información del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE) de CONAF. El tema de esta ocasión fue el monitoreo de especies que son objeto de conservación y amenazas en nuestro territorio.

Diego Valencia informó que actualmente SNASPE cuenta con 106 unidades repartidas entre Arica y el Parque Nacional Cabo de Hornos, situado en el extremo Austral de nuestro territorio. Aclaró que estas están distribuidas en tres categorías: Parques Nacionales, Reservas Nacionales y Monumentos Nacionales.

“Tienen una categoría bien especial; ya que están bajo un paraguas de una convención internacional que protege y dictamina que se puede hacer y que no se puede hacer dentro de estás unidades. Además, el Estado chileno administra estas áreas con fines de conservación, pero también muy enfocados a los desarrollos comunitarios que naturalmente tienen que existir”, explicó el jefe de la SNASPE de la CONAF.

Para Diego Valencia, el tema de la conservación ha superado ciertos paradigmas desde su creación, sobre todo que hoy no está al centro, sino que se hace con la gente. “En esto estamos fuertemente trabajando; ya que tiene que haber una integración comunitaria y una corresponsabilidad acerca de su cuidado”, subrayó.

El primer parque en inaugurarse, aunque no con los atributos que lo conocemos hoy, fue la reserva nacional de El Malleco. “Fue nuestra primera área protegida donde el Estado hizo un decreto para establecer el primer guardaparques. Luego en los años 70 vino la estructura como la conocemos hoy en día”, informó Valencia.

Finalmente, el jefe de la sección de monitores e información del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado, Diego Valencia, indicó que la instalación de cámaras trampa, que son herramientas de monitoreo no invasivas que permiten el posterior análisis de las imágenes que emite, facilita la obtención de información certera sobre la existencia de determinadas especies de fauna silvestre.

“Mediante un indicador que se llama ubicación de sitio, que no es más que sortear cierta cantidad de puntos al azar dentro de un parque nacional y decir cuánto hay en proporción de algún animal versus el total de la muestra que yo hago. Sí yo tengo 100 puntos de muestreo y en 50 de ellos encuentro pumas, yo digo que hay un 50 % de ocupación de esa especie en ese lugar”, concluyó el experto.