En la última Clase Abierta, conversatorio encabezado por la periodista Victoria Walsh, se abordaron los detalles de Misión ChileUSS, iniciativa de la Universidad San Sebastián, orientada a facilitar la colaboración de actores públicos y privados para la implementación de proyectos que impacten positivamente en comunas ubicadas en zonas de rezago.

En esta oportunidad, los panelistas fueron: el Psicólogo Claudio Orellana, director de Empleabilidad y Egresados de la Universidad San Sebastián y líder del programa Misión ChileUSS; y Mabel León, Odontóloga, egresada de la misma casa de estudios y voluntaria de dicho programa.

Claudio Orellana, explicó que el programa Misión ChileUSS, busca generar una articulación entre el mundo público y el privado para producir un impacto en zonas de alta vulnerabilidad o en lugares extremos de nuestro país. “Hace mucho tiempo que, como Universidad, venimos pensando en cómo proyectar el trabajo que ya se venía haciendo. Desde la vicerrectoría de vinculación con el medio, donde está instalado el programa Misión ChileUSS, hace tiempo que se generan proyectos llamados colaborativos. Se trata de instancias donde estudiantes dentro del marco de alguna asignatura generan proyectos donde intervienen en la comunidad”, relató el director de Empleabilidad y Egresados de la USS.

La idea de la iniciativa es contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas y promover el desarrollo sostenible, pero a su vez, incentivar a que los egresados USS adquieran experiencia laboral y accedan a una oportunidad única de participar de una instancia de transformación personal y profesional.

Mabel León, egresada de la USS y voluntaria del programa, entregó detalles de la primera acción que llevó a cabo este proyecto. Se trata de Impacto en salud bucal infantil, desarrollado en Talcahuano, a través del colegio San Francisco de esa ciudad. “Tuve la oportunidad de estudiar en una Universidad, donde el trabajo social es primordial y cuando uno está en el pregrado y logra hacer estas intervenciones es super impactante para uno como estudiante. Y ahora que exista un programa que nos permita seguir trabajando en lo que tanto nos gusta, es una oportunidad increíble”, detalló.

Esta intervención contó con un equipo compuesto por seis odontólogos, dos nutricionistas y dos trabajadores sociales, además de cuatro asistentes dentales y un equipo administrativo quienes se instalaron durante un mes en un espacio habilitado como clínica dental con equipos de última generación. El objetivo era dar de alta en materia dental a más de 560 niños de prekínder a octavo básico del establecimiento.

Durante todo el proceso, fueron acompañados y asesorados por académicos de la Casa de Estudios, lo que les permitió hacer intervenciones de mayor complejidad, con toda seguridad para los niños.

En los próximos meses, este programa de salud bucal se extenderá a otras comunas de la región del Biobío, dado que la meta es beneficiar a más de mil niños de esas localidades. Para el próximo año, está programado el inicio de una actividad similar en Los Lagos, que se realizaría en conjunto con la JUNAEB, en las comunas de Chaitén y Puqueldón, en Chiloé.

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