En una nueva edición de TXS Health, la conductora Andrea Obaid tuvo como invitada durante el segundo bloque del programa a Natalia Rebolledo Fuentealba, Investigadora Postdoctoral CIAPEC – INTA, quien habló sobre un tema que ha tenido bastante relevancia sobre los últimos días. Se trata del llamado que hizo la Organización Mundial de la Salud a no utilizar edulcorantes, ya que estos no tendrían beneficios a largo plazo e incluso podrían ser causantes de enfermedades como diabetes o cáncer.

Frente a este nuevo planteamiento es que surgen diferentes preguntas entre los consumidores sobre qué se puede consumir para no afectar nuestra salud. En esta línea es que Natalia Rebolledo explica que esta recomendación de la OMS se realizó teniendo en cuenta las recomendaciones anteriores que existen sobre la reducción del consumo de azúcar. “La OMS hace este llamado, pero no para que la gente vuelva a consumir azúcar, sino que tratar de reducir el edulcorante porque no se ha visto que tendría beneficios a largo plazo en la disminución del peso corporal en adultos y niños, y que tampoco tendría beneficios para prevenir el desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles”.

Existiendo ambos estudios de la OMS que demuestran por un lado que el consumo de azúcar sería perjudicial para la salud, y que los edulcorantes no tendrían el impacto beneficioso que se pensaba, es necesario saber qué es lo que podemos o no podemos consumir en nuestra dieta.

Sobre esto Natalia Rebolledo destaca dos cosas importantes, uno que el azúcar está demostrado con evidencia clara que hay que limitar su ingesta en exceso, “especialmente si uno tiene patologías de base, ya sea diabetes, resistencia a la insulina o incluso triglicéridos altos”. Por otro lado, esta nueva recomendación sobre los edulcorantes no incluye a la alulosa, tagatosa o a los azúcares alcoholes como manitol, salitol, sino que se restringe a ocho “que son los no azúcares que serían la sucralosa, la stevia, que si bien nosotros pensamos viene de una planta es natural, no es tan así, el aspartamo, acesulfamo, ciclamato, sacarina y otros dos que no son tan consumidos en Chile”.

Teniendo estos antecedentes y sobre la pregunta de qué consumir, Natalia Rebolledo explica que lo ideal sería no volver al azúcar, y tratar de reducir el consumo de los productos que tienen edulcorantes como los antes mencionados.

La reducción de la ingesta que se debe realizar no tiene que ver principalmente con las gotitas endulzantes, que sólo representan un 10% de nuestro consumo, sino que los productos que están etiquetados como light y que tienen estos edulcorantes entre sus ingredientes, “la mayoría que hemos visto están en las bebidas light, jugos light, en general todos los productos light, los postres que aparecieron ahora, o los yogurt, las leches saborizadas. Todos los productos que en general dicen light tienen algún edulcorante, de hecho, algunos debido a la ley de etiquetados como hubo revolución, hay algunos productos que tienen combinación de azúcar y estos endulzantes”.

Idealmente con esta nueva recomendación de la OMS debería existir más información sobre los ingredientes de los productos que consumimos, algo en lo que en Chile ya estamos más avanzados gracias a la Ley de Etiquetado, aunque podríamos regular en mayor medida como lo hacen México y Argentina, quienes advierten que el consumo de edulcorantes no es indicado para menores. “No sabemos cómo la población va a reaccionar a este tipo de etiquetas porque no ha habido nada publicado ni en consumo, ni en las compras, entonces es algo que hay que estar monitoreando”.

Sobre este mismo tema, es que Natalia Rebolledo junto a su equipo se adjudicaron un fondo de investigación en enero de este año, para estudiar cómo el consumo de sucralosa se asocia a alteraciones metabólicas en lactantes, preescolares y adolescentes en Chile. “Aún no tenemos resultados porque esto es nuevo, lo que sí hemos ido monitoreando es cómo ha ido cambiando en el tiempo, pensando en la Ley de Etiquetados, que vimos que hubo reformulación, que bajaron los azúcares y que subió en los endulzantes, dentro de todo algo positivo es que los niños no están pasando estos límites seguros que tienen los edulcorantes”.