Anahí Ocampo, Académica del Departamento de Gestión Forestal y Medio Ambiente de la Universidad de Chile, relata su experiencia y desafíos como investigadora en nuestro país
En un nuevo episodio de Rockstars, el conductor Gabriel León entrevistó a Anahí Ocampo, Académica del Departamento de Gestión Forestal y Medio Ambiente de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, quien entregó detalles sobre su experiencia en Chile y acerca de sus desafios.
El recorrido de Anahí Ocampo ha involucrado diversos lugares, como Cochabamba, Zaragoza, Tucson y finalmente Chile, donde principalmente ha desarrollado un trabajo de investigación interdisciplinario, el cual desarrollar en nuestro país ha sido todo un desafío. “Me llevó muchos años ganarme un fondo de investigación porque no tenía donde postular, me era muy difícil escribir una investigación y no mezclar teoría, no mezclar metodologías, porque cuando te formas en la interdisciplina tienes muy poco respeto por los límites”.
A pesar de esto, poco a poco Anahí Ocampo ha logrado posicionarse dentro del área de la investigación, y actualmente y gracias a sus inicios, se encuentra desarrollando proyectos en torno al agua. “Llevo muchos años, desde que llegué a Chile trabajando el tema del agua de la mano de ingenieros hidráulicos, me gusta mucho lo que hacen y siempre soy la patita que trata de meter la parte social en lo que ellos hacen, y traducir lo que hacen a las personas”.
En esta línea, es que durante los últimos años, debido a los cambios que ha vivido Chile, es que Anahí Ocampo sintió que se podía perder información valiosa, por lo que su pregunta de investigación se enfoca en tratar de aprender de lo bueno y malo, del conocimiento que han generado las organizaciones de agua. “Mi enfoque viene de la capacidad adaptativa que se llama, pero también desde la gestión colaborativa. Esta idea de cómo nos adaptamos y si todo lo que necesitamos para adaptarnos son cosas materiales o son aspectos, habilidades sociales en las que no estamos invirtiendo”, esto teniendo en cuenta la crisis hídrica que enfrentamos actualmente.
Sumado a esto, es que Anahí Ocampo explica que su área de interés es “entender los problemas ambientales desde el punto de vista de las personas, más allá de lo que crean, porque creo que si sacamos un poco las barreras que nos ponemos, lo que solemos encontrar es a personas que están pasando por los mismos problemas”. Ejemplo de esto es lo que vivió en Tucson, donde la escasez de agua también era un problema para la comunidad, causando divisiones hasta que se dieron cuenta que trabajando en la misma dirección podían resolverlo, algo que se podría llevar al escenario nacional.
Con respecto a esto, y en vista de la propuesta de nueva Constitución, Anahí Ocampo cree que el futuro de esta discusión sobre temas de agua, “ojala podamos pasar de esa reflexión a la siguiente etapa, que espero sea mas positiva, más constructiva”, agregando además lo complejo que es hacer ciencia en temas como estos, ya que está la disyuntiva entre involucrarse con los conocimientos que posee o ser neutral para continuar investigando, “en temas de aguas siempre está esa discusión”.