Francisca Donoso: “Estamos educando sobre las posibilidades que hay en reutilizar”
El Consorcio Santa Marta, ubicado en la parte sur de la Región Metropolitana, trabaja fuertemente sobre el manejo de los residuos y en su reutilización. Además, gestionan los desechos del 30% de los habitantes de esta zona y eso exige un enorme desafío que tiene que ver con la optimización de procesos. Francisca Donoso, jefa de Asuntos Corporativos del Consorcio, explica el funcionamiento.
En conversación con Victoria Walsh, del programa Café Plus, la profesional comenta el presente de la compañía y la visión con miras a 2024. “Santa Marta es un relleno sanitario que atiende al 30% de los ciudadanos de la Región Metropolitana. Hoy, con la gestión de residuos, generamos energía limpia, en una central de energía renovable no convencional, que se inyecta directamente al sistema eléctrico nacional”, explica Donoso.
Además, el Consorcio gestiona los residuos líquidos, proveniente de la basura, los cuales son tratados en un 100% dentro de sus instalaciones. “Como empresa estamos a la vanguardia, porque todos los elementos que se generan a partir de la descomposición de los residuos son tratados dentro de nuestro relleno. Estamos apuntando también a generar una planta de compostaje que sería como un paso adelante en la reutilización de todos los excedentes orgánicos”, agrega.
Mejores iniciativas
Hace aproximadamente dos años, Consorcio Santa Marta gestionó una triple alianza junto a la Fundación Realim y la feria de Lo Valledor. El acuerdo innovador, de economía circular, se refiere al traslado de más de 600 toneladas de residuos orgánicos, desde la feria, hacia distintas comunas como Paine, San José de Maipo o Til Til.
Hace poco, el Consorcio firmó un acuerdo junto a la Seremía de Agricultura para redefinir la forma de tratar los excedentes orgánicos. “El Gobierno se dio cuenta que es una economía circular que impacta directamente y que es inmediata. Todos los jueves vamos a Lo Valledor a buscar ese excedente orgánico, que iba a ser utilizado como un residuo, y lo ocupamos, por ejemplo, como alimento para un animal que está en una zona de sequía”, señala Francisca Donoso.
Por otra parte, dentro de las cosas positivas de este trabajo tiene que ver además con el interés de la gente por gestionar los residuos. Consorcio Santa Marta está trabajando fuertemente en la educación ambiental dentro de esta misma línea. “Estamos implementando en dos escuelas rurales este proyecto, a través de talleres medioambientales donde los llevamos a conocer nuestro relleno sanitario y conozcan sobre la generación de energía”, comenta.
Además, en los especifico, los llevan a ver la operación completa, desde cuando se carga el camión en la feria de Lo Valledor con los excedentes orgánicos. “En el fondo se educa ambientalmente en las posibilidades que hay de reutilizar. Es importante que conozcan, es parte de educar. Por otro lado, se incentiva a las personas y las futuras generaciones que puedan separar los residuos en su origen”, explica Francisca Donoso.
Finalmente, la jefa de Asuntos Corporativos del Consorcio Santa Marta espera que más actores se unan en este trabajo para que se pueda hacer a gran escala. “El ciudadano tiene que separar en su casa. Por eso mismo, hay que educar desde el colegio. Enseñarles la importancia de la separación, la valorización y la reutilización”, sentencia.