En el capítulo de esta semana de Tech and the City, la conductora Barbarita Lara junto a Gonzalo Padilla compartieron junto a José Martí, Vicerrector de Investigación y Transferencia de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), quien desde Marruecos habló sobre videojuegos y su relación con la educación, además de los nuevos avances del Metaverso.

Si bien en general los videojuegos han tenido una connotación negativa por la adicción que producen en algunos usuarios, estos también se pueden usar como herramienta educacional que está en constante desarrollo. “El uso de la gamificación, aunque es un área reciente, el uso de los juegos o el potencial educativo de los videojuegos se remonta a los años 60’, se remonta a Piaget, se remonta a toda una escuela de pedagogos que se puede rastrear hasta Aristóteles, hasta la cultura más clásica”.

Actualmente los videojuegos se han ampliado a dispositivos de uso diario como los celulares, por lo cual el potencial que tienen es cada vez mayor como herramienta educativa en diferentes áreas. “Podemos ver a gente que está aprendiendo un idioma mientras va en transporte público, o que puede aprovechar cualquier momento de espera para mejorar la competencia matemática, para desarrollar. Los juegos tienen una parte muy positiva que es el entretenimiento, es de los grandes motivadores de la humanidad, la parte lúdica, si se utilizan para un fin con propósito es una gran herramienta”.

Dentro de los últimos avances en el mundo de la tecnología y videojuegos y que podría permitir explotar más la faceta educativa de estos, está la llegada del Metaverso cuyo descubrimiento se le atribuye al creador de Facebook, Mark Zuckerberg, pero que José Martí explica existe desde hace muchos años. “El Metaverso a nivel conceptual nace en la literatura de ciencia ficción, aparece en los años 80’ en numerosas películas, y últimamente un ejemplo muy claro vinculado a los videojuegos, algo que se puede parecer más al concepto de Metaverso que se está percibiendo es Ready Player One de Steven Spielberg”, especificando que este Metaverso no es una panacea, y no deja de ser un universo nuevo más allá del universo físico que conocemos.

Algunas de las herramientas que puede otorgar el Metaverso a la educación, así como también los videojuegos, es una enseñanza más personalizada en cada alumno, “todas estas tecnologías están llamadas a jugar un papel importante. Nosotros desde VIU estamos desarrollando un piloto de realidad virtual, vamos a utilizar gafas de realidad virtual, obviamente queremos testear un poco el piloto para ver cómo el alumnado es de receptivo ante esta tecnología”, comenta José Martí, aclarando cuál es el futuro de la educación y la forma de desarrollar esta, “la clave es utilizar una tecnología que permita mejorar el aprendizaje, si no, no tiene sentido”. A pesar de los beneficios que puede tener la tecnología en el futuro de la educación, la pregunta es si estamos preparados y tenemos las herramientas necesarias para poner todo esto en práctica. “Creo que es muy interesante empezar a hacer pilotos y sobre todo antes de seguir avanzando, al final el centro de la educación es el estudiantado, no tienes que diseñar tú lo que consideras, si no que tienes que facilitar o poner los medios, adaptarte a sus necesidades para que estén motivados y puedan seguir las clases”, explica José Martí.

En el capítulo de esta semana de Tech and the City, la conductora Barbarita Lara junto a Gonzalo Padilla compartieron junto a José Martí, Vicerrector de Investigación y Transferencia de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), quien desde Marruecos habló sobre videojuegos y su relación con la educación, además de los nuevos avances del Metaverso.

Si bien en general los videojuegos han tenido una connotación negativa por la adicción que producen en algunos usuarios, estos también se pueden usar como herramienta educacional que está en constante desarrollo. “El uso de la gamificación, aunque es un área reciente, el uso de los juegos o el potencial educativo de los videojuegos se remonta a los años 60’, se remonta a Piaget, se remonta a toda una escuela de pedagogos que se puede rastrear hasta Aristóteles, hasta la cultura más clásica”.

Actualmente los videojuegos se han ampliado a dispositivos de uso diario como los celulares, por lo cual el potencial que tienen es cada vez mayor como herramienta educativa en diferentes áreas. “Podemos ver a gente que está aprendiendo un idioma mientras va en transporte público, o que puede aprovechar cualquier momento de espera para mejorar la competencia matemática, para desarrollar. Los juegos tienen una parte muy positiva que es el entretenimiento, es de los grandes motivadores de la humanidad, la parte lúdica, si se utilizan para un fin con propósito es una gran herramienta”.

Dentro de los últimos avances en el mundo de la tecnología y videojuegos y que podría permitir explotar más la faceta educativa de estos, está la llegada del Metaverso cuyo descubrimiento se le atribuye al creador de Facebook, Mark Zuckerberg, pero que José Martí explica existe desde hace muchos años. “El Metaverso a nivel conceptual nace en la literatura de ciencia ficción, aparece en los años 80’ en numerosas películas, y últimamente un ejemplo muy claro vinculado a los videojuegos, algo que se puede parecer más al concepto de Metaverso que se está percibiendo es Ready Player One de Steven Spielberg”, especificando que este Metaverso no es una panacea, y no deja de ser un universo nuevo más allá del universo físico que conocemos.

Algunas de las herramientas que puede otorgar el Metaverso a la educación, así como también los videojuegos, es una enseñanza más personalizada en cada alumno, “todas estas tecnologías están llamadas a jugar un papel importante. Nosotros desde VIU estamos desarrollando un piloto de realidad virtual, vamos a utilizar gafas de realidad virtual, obviamente queremos testear un poco el piloto para ver cómo el alumnado es de receptivo ante esta tecnología”, comenta José Martí, aclarando cuál es el futuro de la educación y la forma de desarrollar esta, “la clave es utilizar una tecnología que permita mejorar el aprendizaje, si no, no tiene sentido”.

A pesar de los beneficios que puede tener la tecnología en el futuro de la educación, la pregunta es si estamos preparados y tenemos las herramientas necesarias para poner todo esto en práctica. “Creo que es muy interesante empezar a hacer pilotos y sobre todo antes de seguir avanzando, al final el centro de la educación es el estudiantado, no tienes que diseñar tú lo que consideras, si no que tienes que facilitar o poner los medios, adaptarte a sus necesidades para que estén motivados y puedan seguir las clases”, explica José Martí.