El triángulo norte de Centroamérica vive una erosión de la democracia
En el programa Sala de Situaciones, Guillermo Holzmann, tuvo como invitado al periodista y analista político hondureño, Edgardo Rodríguez. Juntos abordaron la situación democrática de Centroamérica y el caribe.
Para Edgardo Rodríguez la región da cuenta de un debilitamiento de la democracia a excepción de Costa Rica y Panamá.
Sin embargo, en lo que se conoce como el triángulo norte de Centroamérica, es decir: Guatemala, El Salvador y Honduras, sumado a Nicaragua, se vive un panorama poco alentador en materia de Estado de derecho y fortalecimiento de las instituciones. “Tras el retorno a la democracia a comienzos de los 80, pareciera que se ha agotado la democracia y hemos entrado a una zona de debilitamiento con acciones desde el poder que lastiman su funcionamiento”, aclaró el especialista.
Edgardo Rodríguez atribuye este escenario a 2 factores. El primero: la penetración del crimen organizado proveniente del narcotráfico que ha erosionado a los operadores de justicia, así como al sistema financiero y los partidos políticos.
El segundo aspecto, según Rodríguez, es que las élites económicas han perdido el rumbo lo que ha llevado a situaciones de crisis política en la región. “Lo hemos visto en Honduras en el año 2009 y actualmente lo vemos en Nicaragua donde cada vez se consolida un régimen abiertamente autoritario”, señaló.
En relación con los partidos políticos, Rodríguez aclaró que la región vive un panorama variado. “En Guatemala, por ejemplo, cada presidente que llega al poder forma su partido y luego desaparece con el término de su periodo”, concluyó.
Finalmente, el periodista hondureño se refirió a la relación de Centroamérica con las potencias mundiales, particularmente con Estados Unidos que geográficamente se encuentra muy cerca. Señaló que en el caso de Honduras el 80 % de las exportaciones van hacia el país del norte.
Admitió que la política exterior estadounidense sigue gravitando en la zona, especialmente en el triángulo norte. Sin embargo, con la actual administración de Joe Biden temas como la migración han encontrado una postura bastante más crítica.